Muy pocas bandas podrían aguantar diecisiete años de carrera consiguiendo
que cada disco y cada directo te deje mejor sabor de boca que el anterior. Rippers son de esos. Tras cinco largos y varios 7″ (incluido un split con Turbonegro), la banda publica Fire Träctat, su primer disco para BCore, en el que
recogen la quintaesencia de su punkrock oscuro y rabioso.
En Fire Träctat las guitarras fluyen del sosiego a la ira mientras la voz se arroja al abismo sin miedo a que éste le devuelva la mirada.
Así consiguen recoger en diez canciones toda su fuerza primitiva, un sonido crudo, de una belleza primordial que sugiere a gritos, un verdadero descenso al infierno en el que incluso las cuerdas de las guitarras se confiesan.
El artwork del disco esta extraìdo de de la obra de William Blake